BLOG

8 Errores que no debes cometer en una estrategia de RRSS

Estrategia de RRSS: errores más comunes

¿Ya te has iniciado en el apasionante mundo de las redes sociales? Seguro que en este tiempo te has percatado de todos los beneficios que pueden ofrecerte. Las redes sociales son una ventana abierta, un escaparate situado justo en frente de la mirada de tus potenciales clientes. Son una herramienta con un poder infinito y muy, pero que muy, económica. Esta fórmula hace que muchas empresas se lancen a ellas sin haber analizado bien la situación y sin una hoja de ruta marcada.

Por ello, hemos tejido para ti una red, para que no te lances al vacío. Aquí tienes un listado con los que, según nuestra opinión, son los ocho errores más comunes en una estrategia de redes sociales y que debes evitar.

  1. No tener una estrategia

Precisamente, uno de los fallos más generalizados es no tener una estrategia. Muchas empresas están presentes en Social Media pero carecen de estrategia, y esto es realmente lo que marca la diferencia entre utilizar las redes como una herramienta de marketing o, simplemente, como un pasatiempo. Marca un objetivo, analiza tu competencia, estudia a tu público objetivo y diseña un calendario.

  1. No tener marcado un objetivo

El objetivo es uno de los ejes principales de una estrategia. ¿Qué quieres conseguir? Si no te marcas un destino, nunca sabrás si vas por buen camino, si te estás desviando o, por el contrario, si ya lo has alcanzado. Define una meta y trabaja en esa dirección.

Los objetivos deben ser SMART, algo de lo que ya hemos hablado en anteriores posts: Específicos, medibles, alcanzables, relevantes y concretos en el tiempo. Puede ser que tu intención sea aumentar ventas, incrementar el número de visitantes, fidelizar o darte a conocer, pero lo que está claro es que debes enfocar tu estrategia hacia una finalidad.

  1. Querer estar presente en todas las redes sociales

Sé sincero contigo mismo y no quieras estar presente en todas las redes. Aprende a discriminar. Ya sabes, quien mucho abarca, poco aprieta. Conoce a tu buyer persona y averigua en qué redes se mueve. No pienses en ti ni en lo que te gustaría. Céntrate en tu potencial cliente e intenta llegar a él.

Nuestro consejo es que, como máximo, estés presente en 3 plataformas. Estúdialas a fondo y determina qué tipo de lenguaje y estilo utilizarás para comunicarte con tus potenciales clientes. También es importante la frecuencia de las publicaciones. Cada red es un mundo y es importante conocer el equilibrio, no pasar desapercibido pero tampoco saturar a tu audiencia.

  1. Centrarte en la cantidad antes que en la calidad

Tanto en el contenido que difundes como en los seguidores.

Debes ofrecer contenido de valor, que interese a tu público. No te obsesiones con publicar por publicar y presta atención al mensaje. Por ello, es importante establecer un calendario de publicaciones para evitar colgar mensajes vacíos de contenido a lo “desesperado”.

Los seguidores también deben ser de calidad. Es mejor tener 40 potenciales clientes a quienes les interesa lo que compartes que 3 millones de seguidores que no les interesa nada tu marca y nunca te van a comprar porque no son tu target. Es totalmente lógico ¿no crees?

  1. Repetir el mismo tipo de contenido o no contrastarlo

Reciclar contenido está bien, no es un pecado, y menos si es un contenido que ha tenido éxito en anteriores publicaciones. Puedes cambiar el formato, ampliarlo o hacer alguna modificación, pero sólo cuando lo consideres oportuno. La intención es sorprender a tu audiencia con tus publicaciones y ofrecerles contenido variado.

Cuando nosotros no somos los que creamos el contenido, sino que simplemente lo compartimos y difundimos, es imprescindible contrastar la información. Es, simplemente, básico para la credibilidad de tu empresa.

  1. No repasar el copy

Somos humanos y todos nos equivocamos. Además, el teclado se convierte en ocasiones en nuestro peor enemigo. Siempre nos hemos preguntado por qué están tan cerca las teclas de la letra B y la V… Sé meticuloso y lee una y otra vez tu mensaje. Una publicación con una falta de ortografía o de gramática es como salir a la calle despeinado y con la camisa llena de manchas. No querrás que te vea así tu audiencia, ¿verdad?

  1. No ser constante

Debes marcar una frecuencia de tus publicaciones. No sería lógico que a tu audiencia le llegaran en Facebook 20 posts tuyos durante una semana y que luego, porque estás de vacaciones, porque tienes un torneo de paddle muy importante o porque, simplemente, no te acuerdas, estuvieras un mes entero sin publicar nada. Una vez más, destacamos la importancia de crear y cumplir un calendario.

  1. No medir los resultados

Está claro que para saber si una acción de marketing funciona hay que medir los resultados. Las redes sociales te lo ponen muy fácil. Hoy existen muchas herramientas de medición diseñadas para analizar los resultados en Social Media. Hootsuite, Facebook Insight, Klout o Google Analytics son solo algunas de ellas. Todas son de fácil manejo y muy intuitivas.

Muchas personas creen que publicando en base a una estrategia, siguiendo un calendario y logrando difusión ya es suficiente. Pues no. Permítenos decirte que se equivocan. Analizar los resultados te permitirá mejorar en futuras acciones de marketing y conocer mejor a tus clientes potenciales. No lo dudes.

Más de 2000 millones de personas en todo el mundo utilizan las redes sociales, o lo que es lo mismo, casi el 70% de la población mundial con acceso a Internet. ¿Vas a cerrar esta gran ventana abierta a tus potenciales clientes?

Conoce nuestras soluciones

Infórmate sin compromismo y descubre cómo impulsar el éxito de tu negocio de forma eficaz y rentable

Llámanos al 616 632 613

si lo prefieres, nosotros te llamamos. Déjanos tus datos

Cuéntanos tu proyecto
Top